La esperanza que viene del cielo
Reflexiones de las Buenas Nuevas:
Haciendo que las escrituras sean significativas
para tu vida diaria.
por Terry Modica
“Nuestras batallas contra el mal no han terminado aún, pero Jesús ya ha obtenido la victoria para nosotros.”
Reflexión de las Buenas Nuevas para:
1er. Domingo de Adviento
Noviembre 27, 2022
Oración para hoy:
Mi buen Señor: que mis obras y mis pensamientos me conduzcan cada día más cerca de ti. Dame fortaleza para no distraerme en este camino y seguir firme hacia esta meta. Amén.
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Lecturas de hoy:
Isaías 2, 1-5
Salmo 122 (121), 1-9
Romanos 13, 11-14
Mateo 24, 37-44
bible.usccb.org/es/bible/lecturas/112722.cfm
La esperanza que viene del cielo
La esperanza es el tema del Primer Domingo de Adviento. En las lecturas de la Misa, Isaías describe un futuro en el que todo está bien porque (1) Dios es reconocido como la máxima autoridad y (2) obedecerle es la más alta prioridad de la gente.
Esta visión dio una gran esperanza a los israelitas oprimidos. Hoy en día, si nos fijamos en esto como una descripción del cielo, nos da gran esperanza a nosotros también. Al momento de morir, nos serán “impuestas condiciones”, porque no nos quedamos siempre en los caminos de Dios (una buena razón para el purgatorio), pero viviremos en la luz del Señor después de la muerte y no habrá más guerras que pelear.
Sabiendo que este es nuestro futuro, podemos ver nuestras pruebas presentes como una preparación para el cielo. Las armas que usamos ahora para derrotar y superar los poderes de la oscuridad se podrán utilizar como rejas de arado para enriquecer nuestro suelo (nuestra vida terrenal), llevándonos a un nuevo crecimiento y produciendo una cosecha en el ministerio. Los sufrimientos que se convierten en ministerios para ayudar a otros, hacen que las penurias sean muy valiosas.
A pesar de que Isaías estaba hablando de la venida de Cristo al mundo a través de los judíos, estos versículos nos recuerdan que cuando respetamos la autoridad de Dios y hacemos de la imitación de Cristo nuestra prioridad más alta, todo está bien para nosotros. Nuestras batallas contra el mal no están terminadas todavía, pero Jesús ya ha ganado la victoria para nosotros. Nuestra esperanza no se basa en un deseo de paz; nuestra esperanza proviene de la realidad de lo que Jesús ya ha hecho y lo que hará. Por lo tanto, “¡Vamos alegres a la casa del Señor!” (Salmo 122).
La lectura del Evangelio nos dice que nuestra esperanza se cumple sólo si permanecemos despiertos y alertas a las actividades de Cristo. ¿Qué es lo que te está desesperando? La desesperación y la preocupación no son más que distracciones que nos hacen olvidar que Cristo ya ha ganado la batalla. Si nos mantenemos alertas a la presencia de Cristo, reconociendo su autoridad y siguiendo sus caminos, viviremos en la esperanza — no en un deseo — sino en una esperanza que se basa firmemente en la realidad.
Preguntas para la Reflexión Personal:
¿Qué te está desesperando? ¿Qué haría falta para que sientas esperanza? ¿De qué manera necesitas que Jesús venga a ti ahora? ¿Qué puedes hacer para ser más consciente de su presencia a tu lado?
Preguntas para Compartir la Fe en la Familia y la Comunidad:
¿Cómo encuentras esperanza en las dificultades? Describe el momento en que casi pierdes toda esperanza. ¿Cómo te rescató Jesús de esto?
Reflexiona más sobre este tema con nuestro PalabrasVivas: “Una Razón para Tener Esperanza en medio del Terrorismo” en gnm-es.org/lidiando-con-el-terror-y-el-mal-una-razon-para-tener-esperanza-en-medio-del-terrorismo/
© 2022 por Terry A. Modica
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