Firmes como pilares de la verdad
Reflexiones de las Buenas Nuevas:
Haciendo que las escrituras sean significativas
para tu vida diaria.
por Terry Modica
“Al madurar en el uso de los sacramentos, somos purificados para vivir como pilares de la verdad.”
Reflexión de las Buenas Nuevas para:
Miércoles de la 24ta. Semana del Tiempo Ordinario
Memorial de San Andres Kim Taegon, presbítero, y San Pablo Chong Hasang y compañeros, mártires
Septiembre 20, 2023
Oración para hoy:
Señor Jesús: purifica mi corazón de toda actitud de juicio hacia los demás y dame la sabiduría de descubrir todo lo bueno y noble que Tú has puesto en cada persona. Amén.
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Lecturas de hoy:
1 Timoteo 3, 14-16
Sal 110, 1-6
Lucas 7, 31-35
bible.usccb.org/es/bible/lecturas/092023.cfm
Firmes como pilares de la verdad
Nuestra primera lectura de hoy nos habla de la familia de Dios, la Iglesia, que es “el pilar y fundamento de la verdad.” Esta es la Iglesia Católica. Recuerda que en un principio sólo había una Iglesia, una Cristiandad. La palabra “católico” significa universal, y, a veces, nos olvidamos de esto cuando usamos la palabra “católico” para diferenciarnos de aquellos que son cristianos, pero separados de la Iglesia original.
Como señala Timoteo, esta Iglesia original es el fundamento de la religión cristiana, responsable de la celebración de la verdad para que todo el mundo vea. Fortalecidos por el Espíritu Santo, la Iglesia ha conservado el máximo órgano de la verdad, protegido por 2000 años, a través de la sucesión ininterrumpida de ordenación sacerdotal. Incluso cuando los papas y obispos eran corruptos o controlados políticamente, el Magisterio de la Iglesia continuó protegiendo la verdadera doctrina.
Recuerda también, que Jesús ES la verdad (el camino y la vida). Debido a que retuvo la práctica original de la transubstanciación del pan y el vino en la Eucaristía milagrosa, la Iglesia Católica es el pilar que sostiene a Jesús — en la forma más completa posible — para que el mundo vea.
Sin embargo, para que el mundo reconozca la presencia de Jesús en la Eucaristía y en los otros seis sacramentos, tenemos que defender las enseñanzas de la Iglesia. Necesitamos abrazarlas en nuestras comunidades parroquiales. Tenemos que entenderlas — por qué son beneficiosas, cómo están basadas en las escrituras y por qué vivir según ellas, es la mejor manera y la más amorosa para interactuar con nuestro mundo.
Cuando no lo hacemos, construimos una imagen falsa de la Iglesia usando paredes que impiden a otros ver la verdad.
Por el contrario, cuando nos arrepentimos y dejamos que otros vean el cambio, reforzamos la muralla que protege a las personas de las falsedades que, de otro modo, los mantiene lejos de Cristo.
Ser un cristiano católico no es para cobardes. Hay que tener la fortaleza de Dios para mantenerse firme como un pilar de la verdad. Es una elección, en realidad una serie de opciones a la que nos enfrentamos todos los días. Esta opción es la que nos hace ser “como niños” quejándote con tus compañeros de juego, según lo describió Jesús en nuestra lectura del Evangelio de hoy, o católicos maduros que aceptan la sabiduría de Dios.
¿Y de dónde sacamos la fuerza para mantenernos firmes? De la Eucaristía, que es la forma humana plena de Jesús la Verdad, y de los otros sacramentos.
Al crecer más maduramente en el uso de los sacramentos, somos purificados para que podamos vivir como pilares de la verdad. Y al crecer más maduros en la comprensión de las enseñanzas de la Iglesia, nos convertimos en parte de la base sólida de la Iglesia; nuestros pilares personales no se derrumbarán bajo presión, ataques, o los terremotos de la confusión. No hay una buena excusa para dejar de educarnos en las enseñanzas de la Fe Católica, sobre todo hoy cuando el Catecismo está en línea y los documentos que explican las enseñanzas de la Iglesia están fácilmente disponibles.
No seamos como niños quejándose, que rechazan la autoridad de la Iglesia y su protección de la verdad. Si tenemos alguna objeción a sus enseñanzas, es sólo porque no hemos investigado lo que realmente se está diciendo y no hemos pedido al Espíritu Santo que nos ayude a comprenderlo. ¡Que nuestras vidas, nuestros líderes de la Iglesia y nuestras parroquias siempre sean testigos de la verdad! ¡Amén!
El Catecismo en línea se encuentra en la dirección del Vaticano: http://www.vatican.va/archive/catechism_sp/index_sp.html
© 2023 por Terry A. Modica
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