La ‘experiencia cumbre’ de Cuaresma
Reflexiones de las Buenas Nuevas:
Haciendo que las escrituras sean significativas
para tu vida diaria.
por Terry Modica
“Somos fieles cristianos si no escondemos al Hijo, Jesús, de las personas que nos encontramos.”
Reflexión de las Buenas Nuevas para:
2do Domingo de Cuaresma
Febrero 25, 2024
Oración para hoy:
¡Gracias por los momentos de gozo en medio de la prueba Señor! Son esos momentos los que me fortalecen y me transforman cada día, pareciéndome más a ti. Amén.
¡ÚNETE A LA ORACIÓN COMUNITARIA!
Poderosas oraciones católicas con la reflexión diaria están disponibles en nuestro canal de YouTube en español.
Lecturas de hoy:
Génesis 22, 1-2. 9-13. 15-18
Salmo 115, 10. 15-19
Romanos 8, 31b-34
Marcos 9, 2-10
bible.usccb.org/es/bible/lecturas/022524.cfm
La ‘experiencia cumbre’ de Cuaresma
Piensa en una experiencia “cumbre” que hayas tenido. ¿Cuál fué el momento pico de esa experiencia? ¿Qué lo ocasionó? ¿Qué significó para ti? ¿Cambió tu vida para siempre, o fué solamente una emoción momentánea?
En el simbolismo bíblico, una montaña representa un acercamiento a Dios. ¿Te acercó más a Dios tu experiencia cumbre?
Fué en la cima del Monte Tabor donde Jesús reveló la gloria de Su Santidad a sus amigos más cercanos. Conocido como una “alta montaña” en la escritura, el Monte Tabor es, en realidad, no muy alto. Lo grande fue el evento que ocurrió allí y el por qué.
Algunos de los momentos más significativos en nuestra vida espiritual pueden no haberse sentido como una experiencia cumbre, pero de hecho lo fueron.
Los tres discípulos que fueron testigos de la transfiguración de Cristo se beneficiaron inmensamente al ver Su gloria revelada, porque algún día ellos serían comisionados para asumir Su ministerio en la tierra.
El Padre les dijo, “Este es mi Hijo amado; escúchenlo.” Escuchando a Jesús, somos nosotros quienes somos ahora transfigurados.
La Cuaresma debe ser una experiencia cumbre para cada uno de nosotros. Si seguimos a Jesús hacia la montaña, Su luz consumirá cualquier oscuridad dentro de nosotros.
Mientras más escuchamos Sus enseñanzas y las aplicamos a nuestra vida diaria y a nuestros ministerios, más nos parecemos a Él. Y mientras más nos parecemos a Jesús, más nuestras vidas son transfiguradas por Su luz, y más nuestras vidas transfiguran al mundo a nuestro alrededor.
Tal como nos dice la primera lectura, Abraham no le negó su hijo al Señor, así como Dios Padre no nos negó a Su Hijo a nosotros.
De la misma manera, somos fieles a nuestras responsabilidades de la vida Cristiana si no le negamos al Hijo a las personas que encontramos. Ya sea a través de una palabra evangelizadora, o una mano que ayuda, o un oído compasivo o atento, o dadores generosos de misericordia y perdón o dinero o tiempo, somos las manos y los pies de Cristo hoy en el mundo. Somos su cuerpo terrenal. Somos la respuesta a las oraciones de las personas.
A través de nuestro bautismo, hemos sido capacitados para brillar con la gloria del amor de Cristo. Todos hemos sido comisionados para continuar con Su ministerio en la tierra. ¡Que la experiencia de la Cuaresma nos lleve a niveles más altos de unión con Cristo y Su misión!
Preguntas para la Reflexión Personal:
Identifica un área de tu vida que quieres que Jesús transforme. ¿Qué necesitas para arrepentirte de eso? ¿Cómo necesitas cambiar (con la ayuda de Dios) para que otros vean más de Jesús en ti?
Preguntas para compartir la Fe en Comunidad:
Comparte un ejemplo en el cual dejaste que Jesús te cambiara. ¿Qué tan difícil fue ser cambiado? ¿Por qué querías ese cambio? ¿En qué forma tuvo un impacto en los demás?
© 2024 por Terry A. Modica
Por favor, ayuda a los demás compartiendo esta página.
¿En qué más podemos servirte hoy? Visita nuestra página inicial.