Reconocer los lobos en piel de cordero
Reflexiones de las Buenas Nuevas:
Haciendo que las escrituras sean significativas
para tu vida diaria.
por Terry Modica
“El Espíritu Santo en nosotros nos da buen discernimiento y nos ha enseñado cómo reconocer la voz del Buen Pastor.”
Reflexión de las Buenas Nuevas para:
Miércoles de la 7ma. Semana de Pascua
Memorial de San Isidro Labrador
Mayo 15, 2024
Oración para hoy:
Amado Jesús: yo me cobijo en tu ruego al Padre, para que preserve mi vida y la de mi familia, mientras caminamos hacia la morada que Tú nos has preparado. Amén.
¡ÚNETE A LA ORACIÓN COMUNITARIA!
Lecturas de hoy:
Hechos 20, 28-38
Salmo 68, 29-30.33-36ab
Juan 17, 11b-19
bible.usccb.org/es/bible/lecturas/051524.cfm
Reconocer los lobos en piel de cordero
En la primera lectura de hoy, San Pablo advierte acerca de “lobos rapaces” que dañan al rebaño de Cristo. Vienen desde dentro, nos dice, y desvirtúan la verdad. ¿Para qué? “Para que los discípulos se alejen y los sigan a ellos.” Esto, para usar un cliché moderno, es un lobo con piel de cordero. A veces es un lobo con piel de pastor, que es mucho peor, ya que las ovejas son más vulnerables dado que, naturalmente, confían en sus pastores.
El Papa Francisco entiende esto, ha advertido (14 de abril de 2014) a los seminaristas (y esto se puede aplicar a todos los que están en un ministerio) que tomen en serio las palabras de los profetas: “¡Ay de los malos pastores que se apacientan a sí mismos y no a su rebaño!” Dijo: “Que este ‘Ay’ te haga reflexionar seriamente sobre tu futuro.” Dijo también que si no estamos dispuestos a ser moldeados por el Espíritu Santo, “meditando todos los días el Evangelio… experimentando la misericordia de Dios en el Sacramento de la Reconciliación… alimentándonos con la Eucaristía con fe y amor… siendo personas de oración…. sería mejor que tuviéramos el valor de buscar otro camino”.
Los lobos que vienen desde el interior son los que imponen sus propios criterios o deliberadamente se hacen ver importantes. Algunos creen genuinamente que están tratando de corregir un error o que están haciendo la obra de Dios, pero no están siendo guiados por el Espíritu Santo. Otros son tiranos en la forma en que pastorean a las personas que trabajan bajo su supervisión.
Todos actuamos como lobos a veces. Una forma de actuar como lobo consiste en manipular a los demás para que hagan lo que queremos. Cada vez que tratamos de controlar a los demás para nuestro beneficio personal, somos lobos con piel de oveja; nos llamamos cristianos, pero en realidad estamos ocultándonos detrás de este título para sentirnos seguros mientras nos comportamos muy diferentes a Cristo.
Los lobos desvirtúan la verdad porque lo tienen que hacer; es la única manera en que puedan hacer que las ovejas los sigan. Instintivamente, las ovejas cristianas reconocen que un lobo es un lobo, porque el Espíritu Santo dentro de nosotros nos está dando un buen discernimiento y nos ha enseñado a reconocer la voz del Buen Pastor. Pero cuando un lobo aparenta ser una oveja que está siguiendo a Cristo o, peor aún, cuando un lobo es uno de los pastores de Cristo que ha pervertido su vocación, tenemos que estar atentos, como dijo San Pablo.
Tenemos que mantenernos en unión con Cristo orando tan profundamente que escuchemos las advertencias del Espíritu Santo así como su orientación sobre qué hacer cuando nos encontramos con los lobos. Jesús nos consagró a todos a la verdad como dice en el pasaje del Evangelio de hoy. Tenemos la capacidad, a través del Espíritu de la Verdad, de discernir la verdad y reconocer a los lobos.
Y entonces la pregunta es: cuando veo un lobo, ¿qué es lo que el Buen Pastor quiere que haga para ayudar a rescatar a las ovejas vulnerables?
© 2024 por Terry A. Modica
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