¿Eres una maceta rota?
Reflexiones de las Buenas Nuevas:
Haciendo que las escrituras sean significativas
para tu vida diaria.
por Terry Modica
“Nada se pierde cuando le damos a Dios nuestras fallas.”
Reflexión de las Buenas Nuevas para:
Festividad de San Santiago Apóstol
Julio 25, 2024
Oración para hoy:
Señor Jesús: necesito aprender a ser humilde para ser tu instrumento entre mis hermanos. Líbrame de mi orgullo y que mi deseo en el servir sea, siempre, llevar un alma más hacia ti. Amén.
¡ÚNETE A LA ORACIÓN COMUNITARIA!
Poderosas oraciones católicas con la reflexión diaria están disponibles en nuestro canal de YouTube en español.
Lecturas de hoy:
2 Corintios 4, 7-15
Sal 126 (125), 1bc-6
Mateo 20, 20-28
bible.usccb.org/es/bible/lecturas/072524.cfm
¿Eres una maceta rota?
¿Qué es deficiente en ti? Piensa en ti como si fueras una jarra de cerámica con grietas. ¡Dios quiere hacer algo impresionante con tus defectos! Como leemos en la primera lectura de hoy, tenemos dentro de nosotros un regalo invaluable para compartir. Aunque este tesoro esté almacenado en una vasija de barro agrietado, no tiene precio en las manos de Dios.
Nuestros defectos son la prueba de que Dios vive dentro de nosotros, porque alimenta al mundo con su agua de vida a través de nosotros, a pesar de nuestros defectos. Permíteme compartir una historia que encontré cuando necesitaba aprender esta verdad.
Una vez, había un criado que fue a buscar agua para su patrón en dos grandes vasijas que llevaba en los extremos de un palo sobre su cuello. Una de las vasijas tenía una grieta en ella; la otra estaba perfecta. Durante el trayecto desde el arroyo hasta la casa del patrón, la vasija agrietada había perdido la mitad de su agua.
“Estoy avergonzada” dijo la vasija agrietada. “¿Por qué?” preguntó el portador del agua. La vasija respondió: “He estado entregando sólo la mitad de mi carga. Esta grieta en mi costado hace que el agua se escape durante el camino a la casa de tu patrón. A causa de mis defectos, tú tienes que hacer más trabajo”.
El hombre sintió compasión por la vasija y dijo: “Hoy, al volver a la casa del patrón, quiero que mires las bellas flores a lo largo del camino”. Es así que la vasija agrietada se dio cuenta de las muchas flores en el camino y esto la animó un poco. Pero al final del camino, todavía se sentía mal porque una vez más se había derramado la mitad de su carga.
El portador del agua dijo, “¿Te diste cuenta de que sólo había flores en tu lado del camino, pero no en el otro lado? Eso es porque siempre he sabido acerca de tu defecto y me aproveché de ello. Sembré semillas de flores en tu lado del camino. Cada día, tú has estado regándolas. Estas flores se utilizan para decorar la mesa de mi patrón. Sin tus grietas, él no tendría esta belleza en su casa”.
En la lectura de la segunda carta a los Corintios escucha estas palabras de consuelo:
Sufro toda clase de pruebas, pero (con la ayuda de Dios) no me angustio.
Me abruman las preocupaciones, pero (con la ayuda de Dios) no me desespero.
Soy perseguido, pero (con la ayuda de Dios) no estoy desamparado.
Estoy derribado, pero (con la ayuda de Dios) no vencido.
A esto le podríamos añadir: tengo defectos, pero (con la ayuda de Dios) no soy inútil.
Nada se desperdicia cuando entregamos nuestros defectos a Dios. Ni nuestras imperfecciones, ni nuestros errores, ni nuestras debilidades, ni nuestros lamentos. Todo depende de qué tan dispuestos estamos a permitir que Dios transforme nuestros defectos en flores — “para que la gracia dada en abundancia pueda traer mayor gloria a Dios”.
¡Si no te gusta algo de ti, pídele a Dios que te muestre las flores que has ayudado a que crezcan!
© 2024 por Terry A. Modica
Por favor, ayuda a los demás compartiendo esta página.
¿En qué más podemos servirte hoy? Visita nuestra página inicial.