Reflexiones de las Buenas Nuevas:
Haciendo que las escrituras sean significativas
para tu vida diaria.
por Terry Modica
“Dios nos da talentos, habilidades y entrenamiento para que podamos ser exitosos.”
Reflexión de las Buenas Nuevas para:
Miércoles de la 14ta. Semana del Tiempo Ordinario
Julio 10, 2024
Oración para hoy:
Jesús, te alabo por todas las caídas que permitiste en mi vida, porque a través de ellas he aprendido más sobre tu bondad y misericordia. Que siempre se cumpla en mí Tu voluntad. Amén.
¡ÚNETE A LA ORACIÓN COMUNITARIA!
Lecturas de hoy:
Oseas 10, 1-3.7-8.12
Salmo 105, 2-7
Mateo 10, 1-7
bible.usccb.org/es/bible/lecturas/071024.cfm
Deshaciéndonos de los pilares sagrados
A veces, la mejor manera de orar por alguien que necesita conversión, es pedirle a Dios que remueva todos los “pilares sagrados” sobre los que esta persona ha estado reclinándose, los sustitutos que le hayan impedido tener una verdadera amistad con el Señor.
Como los israelitas en la primera lectura de hoy, muchos que se resisten a Dios hoy en día, son los exitosos en sus actividades mundanas. Acumulan riquezas, amigos influyentes, o puestos de trabajo de alto rango. Cuanto más éxito tienen, menos reconocen la necesidad de Dios. Ellos viven como si fueran Dios. Confían en sus pilares sagrados más de lo que confían en Dios. No ven ninguna razón para apoyarse en Dios.
Y hay adultos que son simplemente demasiado jóvenes e inexpertos para haber descubierto su necesidad de Dios. Se apoyan en sus sueños, pensando que son lo suficientemente especiales como para tener todo lo que quieren, simplemente por desearlo.
Todos nos apoyamos en soportes equivocados de vez en cuando. Dios nos da talentos, habilidades y formación para que podamos tener éxito, pero no siempre los utilizamos de la manera que él ha elegido para nosotros – esfuerzos que son mejores para nuestras almas, nuestras familias, el mundo y el reino del cielo.
Cuando oramos por nosotros mismos, debemos pedir a Dios que remueva los pilares sagrados que contribuyen a la ilusión de que podemos ignorarlo a él: los pilares de la autosuficiencia, los pilares de las excusas y racionalizaciones que nos permiten pensar que estamos bien cuando en realidad estamos pecando.
Entonces, ¡cuidado! Cuanto más fuertemente nos hemos estado apoyando en estos pilares, más duro caemos. Algunas personas tienen que caer un largo camino hasta llegar al fondo antes de mirar hacia arriba y clamar a Dios por ayuda.
Pero Dios es amable. Dios, en su gran misericordia, da a todos muchas oportunidades de volverse a él antes de estrellarse. Entonces, si nada los conduce a cambiar, Dios, eventualmente, “romperá sus altares y destruirá sus pilares sagrados.”
Los fracasos y las caídas son realmente grandes bendiciones. “Prepárense un nuevo campo, porque es tiempo de buscar al Señor.” Deja que tu cosecha vieja sea destruida, no importa cuán tentado estás de resistir el cambio. Comienza a arar con Jesús. Abandona lo que has estado tratando de lograr, porque estás cosechando de las malas semillas que habías sembrado.
Observa el mensaje edificante que Jesús nos da en la lectura del Evangelio de hoy. “¡El Reino de Dios está cerca!” ¡Toma las semillas que te da Jesús y siembra el Reino de Dios en los campos de tus fracasos, porque milagros surgirán de la nueva tierra y la cosecha será increíble!
© 2024 por Terry A. Modica
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