Reflexiones de las Buenas Nuevas:
Haciendo que las escrituras sean significativas
para tu vida diaria.
por Terry Modica
“Cuando alguien hace una buena obra para ti, es Dios haciéndola a través de él.”
Reflexión de las Buenas Nuevas para:
Jueves de la 3ra. Semana de Adviento
Diciembre 15, 2022
Oración para hoy:
Señor mío: que mis criterios humanos y los deseos de la carne no se interpongan en la obra que Tú quieres hacer, sino que sea yo un instrumento evangelizador en tus manos. Amén.
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Lecturas de hoy:
Isaías 54, 1-10
Salmo 30 (29), 2.4.5-6.11-13
Lucas 7, 24-30
bible.usccb.org/es/bible/lecturas/121522.cfm
¿Quién te ha abandonado?
¿Quién te ha robado tu alegría al abandonarte? En la primera lectura de hoy, Dios dice: “Por un breve momento te abandoné …” ¿Cómo pudo Dios abandonarnos? ¿No nos han dicho una y otra vez: “Yo nunca te abandonaré”?
Isaías estaba escribiendo a los israelitas que habían abandonado a Dios y en consecuencia, habían sido capturados por el enemigo. Dios estaba prometiendo que su tiempo de salvación estaba cerca.
¿Te has desviado al cautiverio? ¿Qué malos hábitos tienes? ¿Qué pecados te están esclavizando? ¿Qué relaciones codependientes están controlándote? ¿Qué tristeza está bloqueando tu alegría? Mientras estás en esa prisión, el Señor no comparte tu cautiverio, aunque nunca deja de amarte y nunca deja de preocuparse por ti. Por lo tanto, se siente como que Él te ha abandonado.
Tu escape del cautiverio es tan cercano, como el Sacramento de la Reconciliación. Entonces, al salir del confesionario, volverás a sentir el gozo de la amistad con Dios.
Y si eso no es suficiente para restaurar tu alegría plenamente, encuentra un terapeuta cristiano que pueda ayudarte a sanar las heridas que te infligieron durante tu cautiverio.
El Señor te llama de vuelta. Con gran ternura te lleva de regreso. Con amor eterno Él tiene piedad de ti y te redime.
¿Quién te ha afligido en espíritu? ¿Dios? Él siempre nos ama y nos hace el bien, pero cuando no lo sentimos, nos lamentamos. Nuestros espíritus se entristecen por la soledad de hacer amistad con un Dios invisible. Bueno, Él tiene una cura para eso también. Él nos dio una comunidad cristiana – el Cuerpo de Cristo morando en la tierra – para darnos su amor palpable.
Cuando alguien hace una obra de caridad por ti, es Dios haciéndolo a través de ellos. Él la inspiró. Dios está llegando a ti.
Todas las cosas buenas vienen de Dios y la mayoría de las veces, las entrega a través de los seres humanos. Si decimos “no” a los dones de bondad que nos ofrecen otros, estamos rechazando la ayuda de Dios, al igual que aquellos que rechazaron el don de Dios ofrecido por Juan el Bautista en la historia del Evangelio de hoy.
Cuando nos sentimos abandonados, rechazados y desatendidos, como si Dios se hubiera escondido de nosotros, es porque no estamos abrazándolo en la comunidad cristiana que él nos ha dado. Debemos preparar el camino del Señor poniéndonos a disposición de sus bendiciones.
Y cuando la gente deja de ser Jesús para ti, quita tus ojos de ellos y centra tu atención en Jesús, que te redimió y nunca deja de amarte.
Para más sobre este tema, lee nuestro PalabrasVivas: “¿Por qué ir a un sacerdote por confesión?” en https://buenasnuevascatolicas.org/preguntas-frecuentes/por-que-sacerdote-confesion/.
© 2022 por Terry A. Modica
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