Reflexiones de las Buenas Nuevas:
Haciendo que las escrituras sean significativas
para tu vida diaria.
por Terry Modica
“Nuestro amor por Dios se profundiza más cuando se purifica y se fortalece con la prueba.”
Reflexión de las Buenas Nuevas para:
Martes de la 7ma. Semana del Tiempo Ordinario
Memorial de San Pedro Damián, Obispo y Doctor de la Iglesia
Febrero 21, 2023
Oración para hoy:
Señor mío: dame un corazón sencillo y humilde, capaz de amar y servir a los demás con verdadera alegría. Amén.
Encuentra el Santo de hoy
BuenasNuevasCatolicas.org/santos-diarios
Lecturas de hoy:
Sirácides 2, 1-11
Salmo 37 (36), (5)3-4.18-19.27-28.39-40
Marcos 9, 30-37
bible.usccb.org/es/bible/lecturas/022123.cfm
Tu amor por Dios ¿está probado y es verdadero?
¿Has experimentado pruebas que desafían tu confianza en Dios? ¡Por supuesto que sí! Es muy normal. Como dice la primera lectura de hoy, cuando servimos al Señor, debemos prepararnos para las pruebas. ¿Por qué? Porque estamos haciendo una diferencia en el mundo – en la vida de las personas – y no todo el mundo quiere aceptar este cambio. Por lo tanto, nuestros esfuerzos causan persecución, rechazo y otras oportunidades para practicar lo que profesamos.
Este punto fue llevado a mí un día cuando traté de asistir a una mujer en la iglesia que se estaba excluyendo ella misma fuera de la comunidad. No fue tanto su rechazo a mi asistencia lo que me desafió, sino mi reacción a su juicio. Me enojé con ella, y entonces Dios me puso en el camino de alguien que estaba enojado. Esto me desafió a reconocer mi propia falta de perdón.
Las pruebas de este mundo nos exponen. ¿Estamos juzgando a los que juzgan? ¿Somos implacables con los que no perdonan? ¿Somos poco amorosos con aquellos que no nos aman? ¿Somos crueles con los que son malos?
¡Tener nuestros pecados expuestos por los pecados de otros puede ser la prueba más importante de nuestras vidas! Estos son los que nos jalan, pero sólo si aceptamos el desafío de crecer. Esto es lo que nos purifica, como el oro probado en fuego, para que seamos fortalecidos en santidad. Esto es lo que nos ayuda a ser fieles al Señor a quien afirmamos amar.
¿Somos verdaderamente sinceros de corazón y firmes en nuestro amor por Dios? Los tiempos de adversidad revelan la respuesta. Está bien sentirse triste durante las dificultades, pero ¿confiamos en Dios lo suficiente como para esperarle con paciencia? ¿Nos aferramos a él en lugar de tratar de resolver problemas con atajos y represalias? ¿Colocamos lo que nos sucede en el contexto de nuestra relación de amor con Dios, que nos asegura que va a convertir todo en una bendición para nosotros (ver Romanos 8:28)?
Una relación profunda con Dios nos permite confiar en su misericordia y compasión, aun cuando lloramos en su hombro y gemimos ante él en el dolor de nuestros sufrimientos.
En una profunda relación con Dios, no nos desanimamos por lo que vemos durante las pruebas, porque estamos seguros de que Dios está haciendo algo maravilloso que aún no podemos ver.
En una profunda relación con Dios, el entendimiento no viene en nuestras mentes sino en nuestros corazones, donde el amor, no el poder del cerebro, nos ayuda a darnos cuenta de la ayuda que él está dando.
Nuestro amor por Dios se profundiza más cuando es purificado y fortalecido en las pruebas.
© 2023 por Terry A. Modica
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